9. Adiós a los pisos chirriantes con talco para bebés
¿Cada paso que das en tu piso de madera hace ruido? Los pedacitos de madera rozándose entre sí podrían ser la razón de tus tablones chirriantes. Simplemente, llenar talco para bebés entre las juntas de tus pisos solucionará este problema. Usar un pincel de maquillaje te ayudará a empujar el talco hacia las grietas y, con suerte, los chirridos desaparecerán. Esta es una de las formas más económicas para evitar los pisos chirriantes. El talco para bebés te salvará de los costos elevados de tener que reemplazar tu piso.
10. Repare las marcas en la alfombra con cubitos de hielo
Directamente sobre el lugar dañado, coloca un cubo de hielo y espera a que se derrita. Cuando se derrita, el agua será absorbida por la alfombra y esto mejorará tu alfombra, o al menos la devolverá a su forma original. Una vez que la alfombra esté completamente seca, utiliza un cepillo de cerdas duras para deshacer cualquier daño persistente. Como alternativa, puedes agregar suavizante de telas para facilitar el proceso de cepillado y eliminar las protuberancias.